lunes, 5 de enero de 2015

Yo y el mundo causó la polémica.

PUESTO ORIGINALMENTE EL 18-11-2009

Así estábamos, discutiendo de series y en concreto un tema muy interesante: hasta que temporada era buena tal o cual, de que series pasa lo contrario y son mejores después de la segunda y/o siguientes, y cualas se van alternando capítulos buenos con malos para sobrevivir e ir tirando. Halléme yo defendiendo una vez más que Seinfeld y Frasier pudieron seguir eternamente, que Las chicas Gilmore sólo sobra la última cuando Rory accede al mundo laboral y se pierde el encanto que aun se mantenía en la universidad, que de Edición Anterior las dos primeras chapeau pero a partir de la tercera se va gastando por su propio peso. Que el tema Expediente-X y Doctor en Alaska dicen que existen episodios sin los protagonistas, pero que los he borrado de mi mente (me muestran un papel con mi letra asegurándolo y advirtiendo que no los busque), que a House le sobra todo lo del concurso de nuevos cachorros que ocupó una temporada entera pero a pesar de eso vale la pena verlos una vez, que Como conocí a vuestra madre pertenece a ese vaivén de bueno/malo tras dos primeras temporadas grandiosas, que The Big Bang Theory aguanta mejor, que Anatomía de Grey ha pasado de ser una fija a ya la veré cuando tenga tiempo (yo aguanté hasta la cuarta inclusive) que Ally McBeal también llegó un momento que se gastó sobre la tercera season, aunque los capítulos en los que sale Cristina Ricci en ambas series son valorados.















Alegrándonos de que The it crowd, In Treatment y Dexter están impolutas viento en popa siguen, cuando pienso: voy a soltar una bomba, a mí me gustaron más las primeras temporadas de Buffy que las últimas. Como en el caso de Las chicas Gilmore es debido a un trasvase que hago del síndrome de Peter Pan a los personajes, porque no quiero verlos crecer. Me gusta más Buffy en los primeros casos, el dire Snyder, Willow inocente y la relación Xander-Cordelia es más graciosa mientras se va formando que ya formada. Sé que a los jóvenes de hoy les mola más de la mitad hasta el fin porque adoran a Spike. Yo las he visto recientemente para llegar a los capis en los que salía Azura Skye y porque por la tele no pasé de la tercera temporada. No diré que la serie no me gustara esas últimas temporadas, pero me quedo de largo con las primeras. Los casos de vampiros y los de otros bichos con sus trajes mal cosidos, Drusilla forever, etc etc...

















Pero para mi sorpresa o estaban de acuerdo o no les molestó. Y estuvimos de acuerdo en que Salvados por la campana con el prota moreno merecen la pena algunos episodios, sobre todo el de Haaarvard. La polémica vino cuando sin tanta intención de crear debate hice un comentario similar respecto a Yo y el mundo. Mucha división de opiniones, más que en el caso anterior. Mis argumentos. Empecemos por el hermano: al principio hasta era soportable, gracioso incluso por su torpeza con las chicas (la hermana de Topanga, o la estelar aparición de Keri Russell). Luego simpemente es un idiota sin sentido. Sigamos por la hermana: de niña adorable a niña repelente. El maestro, Feeny salía más y daba mejores consejos al principio. La relación de los protas, Cory y Shawn al ser la etapa infantil está llena de frikadas y situaciones más graciosas, porque era una sitcom no ''el largo proceso de mal crecimiento de ésta peña''. Así lo escribí, y eso sin entrar en Topanga, una hippie inteligente y graciosa que derivó en un amor por decreto que fue perdiendo todo el carisma. Centrándome sólo en Cory, sus razonamientos (que solía exponer a sus padres para librarse de algún lío) eran originales, divertidos y más aun las excusas cuando le pillaban. Al crecer le pasa como a la serie, no se enfrenta a los problemas adultos con ese arte, sólo chistes típicos y tópicos. Sólo Shawn se mantiene acorde más o menos a su filosofía original. Ya sé que en las últimas temporadas aparecen muchas tías buenas, pero creo que para entonces ya era otra serie muy diferente a los inicios.

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