lunes, 25 de mayo de 2015

La verdadera canción del verano.

PUESTO ORIGINALMENTE EL 10-5-2010

Por un lado, estaba la canción del verano. La que dijeran las radiofómulas y las revistas pop. Por otro, en el extremo opuesto, la canción eurotrance seria e insulsa que traía el dj famoso desde las discotecas prestigiosas de europa, Alemania a poder ser. Y en el término medio, el tipo de canción que quiero tratar hoy. Tan conocida como la canción de verano, pero sin optar a ese trono porque a pesar de sonar cada noche en las zonas de depradación juveniles playeras, llega tarde al concurso y además no es lo bastante irrisoria. Aunque se le acerca. Hablo del dance digno de karaoke improvisado. Lo explico.

Estamos en una carretera o paseo marítimo gastando suela, esto es caminando con destino complejo de pubs (zocos) discoteca o donde bien nos lleve el azar al grupo de amigos en busca de marcha. Cinco metros por delante un grupo de chicas está a lo suyo como si hasta que no se llegue al lugar de bailoteo no se pudiera establecer contacto. En un momento dado se oye, tibiamente pues ya queda poco trecho, la canción del primer antro y como sea una de éstas no pasan ni dos segundos para que las chicas de delante se pongan a cantarla, gritando, riendo como locas, como si fuera el mejor tema del mundo. Karaoke improvisado, ya digo. Pongamos que es 1998. La canción es ésta:



https://www.youtube.com/watch?v=P1qMb4ATqT8

Debe ser algo parecido a un grupo de tíos cantando el himno de su equipo. Las muchachas lo flipaban tanto que yo, asustado ante tal despliegue de euforia, me preguntaba para qué se necesitan drogas o alcohol teniendo éstos momentos de extasiamiento. Cuatro o cinco chicas cantando en plena calle una canción que han elegido su favorita de ese verano es tan respetable (y temeroso) que, desde la prudente distancia en sucesivas ocasiones estuve oído avizor en esos paseos a la caza de la verdadera canción estival, ni tele ni radio una vez más el populacho decide. A veces la ganadora era una tan desenfadada como la anterior pero igualmente pegadiza. Sin embargo, teniéndole mucho cariño, estoy seguro que es el videoclip peor hecho de la historia. Hablo de:



https://www.youtube.com/watch?v=gFxFOGHmiFM

Fondo amarillo, tía que no sabe bailar, además vestida todo de vaquero (tiricia me da eso), rapero intercambiable por cualquiera de otro grupo similar, cámara con parkinson y una rana y un niñito/a que salen sin venir a cuento. Otras veces tanto el videoclip como la canción se acercaban más a la seriedad del eurotrance que decía antes, teniendo sus momentos gurús como Robert Miles o Roger Sanchez porque los vídeos de One and One y Another Chance eran monísimos. Pero siendo verano siempre preferí ceder a la diversión más simple que no estamos en Berlín ni en Amsterdam, sino en el levante español, en un tiempo convulso habiendo dicho adiós a la ruta bakalaera y sin saber el infierno que acechaba a ritmo de reggaeton. Que íbamos a hacer sino refugiarnos en Fun Factory, Kim Lucas y otros de uno/dos éxito/s que sonaban alegres y -casi- comerciales. Además, que más da si al final el dj del pub tiene preparada la canción que no falla, que nos unirá a todos y todas, aunque no sea dance, cantándola y celebrándola como punto culminante de la noche, porque conocemos la letra: Chiquillaaaaaaaaaaaaa... .

No hay comentarios:

Publicar un comentario